miércoles, 29 de julio de 2009

¡Sumáte a la FJC!

¡Compañera, compañero, la revolución te necesita!

Negrito Avellaneda: ¡presente!

lunes, 27 de julio de 2009

Se viene la sentencia en el juicio por el Negrito Avellaneda

E
l 3 de agosto en el Tribunal Oral Federal nº 1 de San Martín, donde se desarrolla el primer proceso judicial por los crímenes cometidos durante la dictadura en el centro clandestino de detención del Ejército en Campo de Mayo, se conocerá la sentencia en el juicio por el secuestro y asesinato del Floreal negrito Avellaneda.

Para esa jornada, el Partido Comunista y la Federación Juvenil Comunista, convocaron a toda la militancia a movilizarse masivamente a los Tribunales de San Martín, para estar presente al momento que se dicte el fallo.

Los acusados por el crimen del Negrito Avellaneda son el ex jefe del Comando de Institutos Militares durante la dictadura militar general Santiago Omar Riveros, y el entonces jefe de la Escuela de Infantería, general Osvaldo García.

Vale recordar que Floreal Avellaneda tenía 15 años cuando fue secuestrado junto a su madre en su casa de la localidad bonaerense de Munro el 15 de abril de 1976. Su cuerpo apareció flotando en las aguas del río de la Plata dos meses después, en tanto su madre estuvo detenida en Campo de Mayo y recobró la libertad en 1978.

Un diálogo a fondo

(Editorial de Nuestra Propuesta del 16 de julio de 2009)

E

l golpe de estado en Honduras ha encontrado una respuesta heroica en su pueblo y una extendida solidaridad en todo el continente.

Pero no solo eso, también ha generado motivos de análisis acerca de los procesos políticos que se desarrollan en la región y las eventualidades a las que están sometidos, habida cuenta de la crisis mundial del capitalismo y los derroteros que los factores de poder tienen previstos para, a toda costa, mantener su subsistencia e impedir los avances democráticos y soberanos en Nuestra América.

En este contexto de crisis es que se está debatiendo, tras las elecciones, en cada ámbito social o político en nuestro país, y en él se inscribe la convocatoria al diálogo que propuso la presidenta Fernández de Kirchner, el 9 de julio en Tucumán.

El Partido Comunista dispone de la Propuesta para enfrentar la crisis, que se presentó en el Hotel Castelar de Buenos Aires en marzo pasado, que animó todas las conversaciones y acuerdos electorales recientes por parte de nuestro partido, y que está plenamente vigente porque plantea que “la lógica de la subordinación al modelo transnacional del neoliberalismo, con sus organismos de control y dictado de políticas, que llevó a nuestro país al precipicio de diciembre de 2001 y al derrumbe del que aún no se ha recuperado, pese al período de `bonanza´ producido por los altos precios de los commodities, petróleo y soja principalmente, reclama un debate a nivel nacional sobre el rumbo adecuado para enfrentar la situación, por fuera del culto neoliberal a la `mano invisible y autorreguladora´ del mercado o la apelación a teorías que solo pondrían algunos parches sin resolver las cuestiones de fondo”.

Dicho esto, debemos puntualizar que el llamado presidencial escinde el diálogo social, al que convoca a organizaciones empresariales y de los trabajadores, del político, al que convoca a los partidos políticos, en lo que parece será un intercambio sobre el sistema de partidos y las cuestiones electorales, que llaman reforma política.

Una verdadera reforma política ha de estar sustentada en las cuestiones más urgentes, como la integración latinoamericana, la ampliación del mercado interno por la vía de la distribución de la riqueza, la recuperación del patrimonio nacional, la promoción a todas las formas de economía popular y social y la defensa irrestricta de las libertades públicas, la democracia y los derechos humanos, constituyen, a nuestro entender, el núcleo de un programa de acción.

Ante el deterioro de la situación social, la escasez de ingresos y la caída de la producción, producto de la grave crisis internacional, el empleo, el salario, la desocupación, la situación de los trabajadores informales y de los jubilados deben constituir la prioridad. Los insistentes reclamos empresariales para mantener su nivel de ganancias, producir despidos preventivos, reducir la jornada laboral, eliminar contratos laborales, suspender las paritarias, devaluar la moneda, eliminar las retenciones, nos llevaría una vez más a momentos similares a los vividos en 2001, en un nuevo y más complejo contexto político y social.

No es regresando a la desgastada receta de “enfriar” la economía reduciendo el gasto público y el consumo, a través de la pérdida del poder adquisitivo del salario real, sino que es necesario terminar con la pobreza y la desigualdad social.

Esta es la única propuesta para los trabajadores, los sectores populares, los pequeños y medios productores urbanos y rurales y requiere cambios de fondo en el esquema tributario, avanzando con gravámenes sobre la actividad financiera y con las políticas de retenciones también a los sectores mineros y petroleros, con políticas públicas que protejan nuestros recursos y paren la fuga de capitales.

La unidad y la movilización de los trabajadores, de los sectores populares en pos de un programa común será la base de una fuerza popular, nacional, patriótica y antiimperialista que pueda concretar una alternativa de gobierno y de poder para alcanzar la libertad, la dignidad y el bienestar que nuestro pueblo merece.

Detuvieron a 7 compañeros en Bahía Blanca

Escrito por Redacción web PCA

Miércoles, 22 de Julio de 2009 12:49

(Buenos Aires 20 de julio de 2009)

La direccion Nacional del Partido Comunista y la Federación Juvenil Comunista repudian la arbitraria detención de militantes de nuestra organización por parte de la policía de la ciudad de Bahía Blanca que el domingo 19 de julio fueron detenidos mientras realizaban una jornada muralista en repudio al golpe de estado en Honduras.

Luego de la detención los 7 compañeros fueron trasladados a una comisaría y durante 5 hs fueron interrogados sobre su ideología con el claro objeto de amedrentarlos.

Gracias a la movilización de abogados y de diferentes organizaciones de derechos humanos y el PC y la FJC los compañeros fueron liberados, exigimos el cese de la persecución a los militantes populares que son una constante en todo el país y en particular en la provincia de Buenos Aires, en el marco de la lucha contra la impunidad de los asesinos de nuestro pueblo durante la dictadura cuando se esta juzgando a los asesinos de los jóvenes comunistas Negrito Floreal Avellaneda y de David Watu Cilleruelo.

jueves, 23 de julio de 2009

Balance del conflicto en Tersuave

Pasadas las elecciones, diversas cortinas de humo protegen al oficialismo provincial de tener que hacerse cargo de sus responsabilidades. Quedó totalmente claro que los Rodríguez Saá se jugaron, como señaláramos anteriormente, por la patronal.

En las negociaciones llevadas a cabo, el gobierno provincial intentó, con éxito, dilatar el conflicto, dándole tiempo a la empresa, y perjudicando enormemente a los obreros. La estrategia fue clara: apostaron al desgaste. Por si fuera poco, intentaron hacer enfrentar a los trabajadores entre sí, tanto dentro de Tersuave como con compañeros de otras fábricas, para que la patronal gozara de total impunidad. Los dos meses de plazo “sugeridos” por Adolfo Rodríguez Saá en la prensa oficial, el Diario de La República, fue la postura antipopular que defendió el ex intendente de Villa Mercedes, Mario Raúl Merlo, intermediario elegido para negociar en Buenos Aires, con una propuesta inaceptable.

Días antes de las elecciones, el PJ, o “Frente Justicialista es posible”, se sacó la careta y salió con los tapones de punta. Alberto Rodríguez Saá, eterno enemigo de los trabajadores, dijo que entre los luchadores había “pícaros”, “politiqueros”, enviados o manipulados desde la oposición. En el programa de Trombetta, cuando se realizó el debate entre candidatos a senador provincial por el departamento Pedernera, el inefable Eduardo Mones Ruiz declaró escandalosamente que en Tersuave no había conflictos sino intereses políticos, ataques desde la oposición, diciendo además que quien encabezaba las marchas era un candidato opositor (en alusión al abogado “Lalo” Estrada). Todo sirve con tal de no reconocer las culpas propias. ¿Qué importa quién es el representante de esta parte en conflicto, o si va o no a las marchas? ¿Eso justifica que las empresas despidan, suspendan, sancionen y cometan numerosos atropellos contra los trabajadores? ¿Hasta cuándo el oficialismo, los Rodríguez Saá y todos los funcionarios elogiados y recomendados por ellos, van a faltarnos el respeto de semejante manera?

El gobierno provincial históricamente ha sido, es y será aliado de los poderosos. Está integrado y copado por ellos. Los Rodríguez Saá son los terratenientes más grandes de San Luis, son grandes burgueses, por supuesto, antinacionales. Esporádicamente en San Luis Sat entrevistan a los trabajadores de Gráfica DellaPena, quienes pudieron salvar sus fuentes de trabajo, y están en vías de administrar la empresa en forma de cooperativa, es decir, será de su propiedad. Lo que no explican los voceros del patrón Alberto es el origen de esa situación. Esos obreros están saliendo adelante gracias a la intervención que el gobierno nacional hizo de Massuh Dellapena, en la provincia de Buenos Aires, de la cual depende la planta de San Luis. Es decir, el gobierno provincial es cómplice criminal de la desocupación, en ningún momento hizo algo por los trabajadores. En la crisis, las empresas y los Rodríguez Saá son socios.

La situación económica se complicará en San Luis. La promoción industrial se terminará en pocos años, y varias empresas ya se han marchado de la provincia. El gobierno provincial no hizo nada por evitarlo. Varias corporaciones no están dispuestas a afrontar mayores impuestos, de hecho circularon fuertes versiones de que Tersuave tenía intenciones de cerrar en San Luis y trasladarse a otra provincia. Esto, sumado a la “injerencia” del Ejecutivo nacional en Dellapena (hecho que molestó bastante a los Rodríguez Saá, pioneros del neoliberalismo antes de que llegara Menem), obligó al patrón Alberto a enviar un proyecto al Parlamento en el que estaría contenida la solución a los conflictos económicos: fábrica que cerrara sería entregada a los trabajadores, junto con la maquinaria y herramientas de producción, entre otras medidas. Pero realmente hay que ser ingenuo para creer que Rodríguez Saá tomaría una medida así. El tiempo demostró que teníamos razón: sería un suicidio político para un proimperialista, representante de la derecha peronista vernácula, aprobar esa ley. Más allá de que los mequetrefes del diario La Nación le dedicaran una nota furiosa, nosotros tenemos claro que ese medio de prensa debería haberlo felicitado por el audaz intento de querer engañar a los trabajadores para que respaldaran al oficialismo, y por otro lado, hacerle un amague a las empresas, las cuales ya conocen a su socio y saben que es una caricia entre líneas. Los burgueses de La Nación deberían adorarlo.

La experiencia demuestra que los trabajadores no pueden ni deben confiar en el gobierno ni en la patronal. Los Rodríguez Saá, pese a los discursos que puedan esgrimir, son una de las variantes más peligrosas de la derecha: reprimen sin pudor (como pasó en 2004, y el año pasado contra los obreros de Pagoda); acusan a quienes reclaman por lo que corresponde, como los docentes y cualquier empleado, en lugar de gobernar para el pueblo; invierten cifras millonarias en obras faraónicas que no ayudan a los más desprotegidos, a los sectores pobres y medios del campo y la ciudad.

A las trabajadoras y los trabajadores del parque industrial y de la ciudad de Villa Mercedes, les proponemos algunas de nuestras propuestas para afrontar la crisis, sostener los empleos y aumentar las fuentes de trabajo digno y genuino:

-Fábrica que cierra, despide o sanciona a los trabajadores injustificadamente, o recurriendo a farsas, deberá ser expropiada y puesta bajo la dirección de los obreros;

-Las empresas que durante años se han beneficiado de la voraz estructura económica que estruja a los trabajadores y se nieguen a rendir cuentas, también deberán correr igual suerte que en el punto anterior;

-Las horas de trabajo deberán disminuir a 6 (seis), creando de este modo un turno más, es decir, muchas fuentes de trabajo;

-El salario básico deberá aumentar por encima del valor de la canasta familiar;

-Pase a planta permanente de los compañeros contratados;

-Reconocer el derecho y la calidad de trabajadores a los integrantes del Plan de Inclusión Social, reemplazando el subsidio por un salario superior a la canasta familiar, brindando un total respaldo estatal a su capacitación educativa y laboral (no con migajas ni poco dinero como hacen los Rodríguez Saá), incluyendo en puestos de planta permanente a quienes estén en condiciones inmediatas de trabajar, y paulatinamente ir sumando a quienes vayan terminando la capacitación (mientras tanto, se les deberá pagar por estudiar), y se les deberá pagar con dinero en efectivo, no con cheques, porque les descuentan un porcentaje, y en varios negocios tienen que gastar la totalidad del mismo porque no les dan vuelto;

-Garantizar el acceso a las personas discapacitadas al trabajo y la cobertura total de lo que necesiten

-No podrán ser obligados a trabajar quienes tienen imposibilidades de hacerlo. El trabajo como tal podrá considerarse de otra forma. Por ejemplo, en lugar de tener que usar la fuerza para martillar, o manipular sustancias, máquinas o herramientas que no pueden controlar, tendrán alternativas como el arte, la pintura, la música, la literatura, el deporte, etc., y si la discapacidad fuera tal que la persona no pudiese realizar actividad alguna, el Estado deberá garantizar su integridad física, moral y espiritual, atendiendo todo lo que requiera con los profesionales y recursos necesarios;

-La capacitación laboral será otorgada por el Estado, y deberá incorporar a las personas discapacitadas, con equipos interdisciplinarios de médicos, psicólogos, pscicopedagogos, trabajadores sociales, que permitan una relación adecuada.

Iremos desarrollando nuestras propuestas y dándolas a conocer al pueblo mercedino, para que las conozcan, puedan analizarlas y hacer las valoraciones correspondientes.

Llamamos nuevamente a la solidaridad con los trabajadores en lucha. Sólo con la unidad popular podremos llegar al triunfo.

CONTRA LA DERECHA Y EL IMPERIALISMO SIEMPRE